Desarrollar un proceso industrial de descerdado e hilado de la fibra de guanaco y su inserción en el mercado internacional de fibras finas de origen animal, es el objetivo de un proyecto que está adaptando la tecnología necesaria para lograr convertir a Chile en el mayor exportador de prendas de fibras de ese camélido.

La iniciativa —cofinanciada por el FIA—  es ejecutada por Fibras Andinas Chile S.A y contempla la caracterización del grosor, largo y factor de confort, entre otros datos. Chile tiene la segunda población más grande de guanacos —después de Argentina— localizada en la Región de Magallanes.

“La innovación de este proyecto radica en el descerdado mecánico o extracción de las fibras gruesas o cerdas, presentes en el pelo de llama y guanaco. Con este proceso, se obtiene un pelo muy fino —en el rango de 16 a 18 micrones de diámetro—, con un nivel de confort muy alto”, señala el coordinador de la iniciativa, Jorge del Caprio, gerente general de Fibras Andinas Chile.

Agrega que la fibra refinada de guanaco podría competir, junto con la vicuña, con prendas y accesorios ultrafinos, dirigidos a mercados de altos ingresos.